Santander a 26 de abril de 2015

Los hechos que pasamos a relatarles son sólo una opinión sin ánimo de ofender a nadie.

El partido celebrado el sábado día 25 de abril en las instalaciones de la Federación Cántabra de Fútbol (Manolo Preciado), entre el primer clasificado de la categoría y el último, pasó a convertirse para nuestros jugadores y nuestro monitor (Jonatan Pacho Sánchez), ya que llegaron al descanso con un marcador en contra por 0 a 15, y que al término del partido el marcador era de 1 a 34.

En el descanso del partido nuestro monitor (Jonatan Pacho), le pide al entrenador racinguista (Sr. Matabuena), que por favor aflojaran un poco, que tenía a los niños hundidos en el vestuario y no querían volver al campo a disputar la segunda parte, con resultado negativo por parte del entrenador del Real Racing Club, poniendo excusas como que para él respetar al rival era jugar al 100 por 100, o que el problema es vuestro, lo que tenéis que hacer es equipos mejores para que no pase esto, o que el formaba jugadores que podían ser profesionales y no le iba a mandar parar. Ahí es donde entra la formación de los monitores y delegados de nuestro club, respondiéndole que lo importante es formar personas, respetar al rival desde la humildad, y que ellos no sabían representar lo que significar el Racing en esta región, que nuestro club cuando el rival es inferior, les decimos a los jugadores que dejen jugar al rival, que no presionen para intentar no meter más goles, a lo cual el Sr. Matabuena respondió (tú eres tú y yo soy yo). Después de esta conversación, nuestro monitor se dirigió al vestuario diciendo a sus jugadores que salieran al campo a intentar divertirse lo máximo posible, a defender el escudo del Calasanz como siempre, hasta que el árbitro pite el final, sin un mal gesto ni una mala patada, ya que, los jugadores racinguistas no tenían la culpa de lo que sucedía. Varios jugadores calasancios, llorando en el vestuario se negaban a salir al campo, pero finalmente entre el monitor y el capitán del equipo consiguieron convencerlos para terminar el partido de la manera más digna posible. El resto del partido siguió por el mismo camino, luchando el balón como si fuera el último y metiendo goles a cada minuto que pasaba por orden de su entrenador, hasta que a falta de 4 minutos para el final, el entrenador racinguista le pide a sus jugadores que toquen más el balón y le dice al árbitro que pite ya el final porque no hay competitividad en el campo, a lo cual nuestro monitor le contesta que si ahora se daba cuenta, y le pide al colegiado que continúe hasta el final para que puedan meter algún gol más y sigan disfrutando del partidazo y del título liguero. El entrenador racinguista le responde que para que le pide antes que afloje y ahora quiere seguir jugando, a lo cual le contesta que para 3 minutos que quedan no necesita ya, ningún favor.

Ante todo esto queremos exponer:

Primero.- Lo que queremos hacer después de relatar lo sucedido, es felicitar a nuestro monitor, por saber llevar la situación (que sabemos que no tuvo que ser fácil), después de ver como sus jugadores sufrían un intento de humillación, y supo calmar y convencer a sus jugadores (que para él son lo más importante), para seguir jugando. Y sobre todo saber representar los valores que tienen tanto este colegio como este club.

Segundo.- Decirles a nuestros jugadores y a sus padres, que estamos muy orgullosos de su comportamiento, tanto en la grada como en el campo, sabiendo mantener la educación que intentamos impartir en este colegio y en este club en todo momento. Es un orgullo para nosotros contar con vuestro apoyo. Gracias.

Tercero.- Después de pasar más de 24 horas después del partido, y pensando fríamente lo que debíamos hacer, queremos decirle al Sr. Matabuena, que esto es deporte base, que estamos hablando de niños de 11 años y que su formación como personas también incluye el deporte, saber ganar y saber perder respetando al rival y al entorno del deporte. Que estamos de acuerdo que esto es una competición y que hay que competir, pero que llegado el momento hay muchas maneras de conseguir que un equipo juegue al fútbol, compita y no humille al rival. Ahí es donde entra la figura de un buen entrenador de fútbol base. Esperamos que la próxima vez recapacite y actúe de forma diferente por el bien de la educación de los niños.

Cuarto.- Al Real Racing Club de Santander, pedirle que cuide estos detalles porque para toda la gente de este colegio y de este club, al cual representamos, el Racing es su equipo de referencia (sirva el detalle que algunos de nuestros jugadores iban a disputar este partido con las equipaciones del Racing), y que con cosas como las sucedidas ayer lo único que generan es malestar en muchas familias de este colegio que son socios y seguidores de nuestro Racing, que ojalá continúe 100 años más, y seguiremos apoyando al Racing todo lo que podamos.

Quinto.- Dar las gracias a los padres de los jugadores del Real Racing Club, que al finalizar el partido dieron su apoyo a nuestros jugadores y a nuestro monitor, mostrando su desagrado por lo sucedido.

Sexto.- Dar las gracias a todas las familias que nos están apoyando estos días, somos una gran familia calasancia, y decirles que después de lo sucedido ayer, no nos vamos a hundir y vamos a trabajar al máximo para la formación de vuestros hijos. Después de la solidaridad mostrada durante toda esta semana con el éxito de la jornada solidaria y después de este fin de semana, la única conclusión que debemos sacar es que somos aún más fuertes que ayer. Gracias.

Este escrito está redactado por:

• José Mª Hernández – Secretario del Club Deportivo Calasanz de Santander
• Fernando Mesones – Coordinador del Club Deportivo Calasanz de Santander
• José A. Cuesta – Coordinador del Club Deportivo Calasanz de Santander
• Jonatan Pacho – Monitor del equipo de 1ª alevín del Club Deportivo Calasanz de Santander

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